Entre la sequía y la tradición: El desafío de los oficios en la Región de O’Higgins

Voces desde la tierra y el agua

Bajo el sol del secano costero y el rumor de los ríos que ya no corren como antes, los oficios tradicionales de la Región de O’Higgins intentan mantenerse en pie. En cada feria costumbrista, en cada taller de aldea o en los patios donde aún se hila y se teje, las artesanas y artesanos continúan trabajando con lo que la tierra les permite conservar.

La crisis climática y la falta de agua no solo han transformado los paisajes agrícolas; también han alterado los ciclos de los materiales que sostienen la creación artesanal. La fibra de totora escasea por la desaparición de humedales, el maíz que da vida a las hojas de choclo se marchita antes de tiempo, la lana se vuelve más difícil de obtener por la falta de pasturas, y el mimbre, símbolo de Chimbarongo, enfrenta la misma sequía que agrieta los cauces de su cultivo.

En este contexto, cada creador se convierte en guardián de una tradición que resiste. Artesanas como Clarisa Marín, Sandra Arriaza, las tejedoras de la agrupación La Torina y el productor y exportador de mimbre Osvaldo Sandoval representan distintas formas de adaptación frente a la adversidad. Mientras ellas reinventan sus materiales, buscan nuevas fuentes y transmiten sus conocimientos para que los oficios no se extingan junto con el agua, don Osvaldo contempla el final de una vida dedicada al mimbre, testimonio de un cambio irreversible.

Sus testimonios, recogidos en el marco de este reportaje, permiten mirar de cerca un fenómeno que va más allá de la pérdida económica: la amenaza al patrimonio vivo de una región que ha hecho de sus manos, su memoria y su entorno natural una forma de identidad colectiva.

Aquí, donde el clima cambia y la tradición persiste, los oficios hablan por la tierra que aún resiste.

Principales oficios y materiales tradicionales en la Región de O’Higgins

ComunaArtesanía destacadaMaterial(es) usado(s)
ChimbarongoCestería / mobiliario de mimbreMimbre, fibras vegetales para canastos, sillas, mesas.
DoñihueTextilería tradicional (mantas de huaso)Lana, seda, telar.
MalloaEscobas de fibra vegetal; trabajos de piedra rosada; tejido de fajasFibra natural “curahuilla”, piedra rosada, lana/textiles.
San VicenteArtesanía en totoraTotora (fibra vegetal) usada para elementos decorativos/funcionales.
PichideguaArtesanía en hoja de choclo, miniaturasHoja de choclo, material vegetal para canastos, individuales y flores.
Santa CruzTallado en madera (estribos)Madera de diversos tipos, cuero para tiras y accesorios.
PelequénTallado en piedra rosadaPiedra rosada local, cantería para “artesanía en piedra”.

Clarisa Marín: resiliencia desde la totora y la pita

clarisa marin

En la comuna de Pichidegua, Clarisa Marín encontró en la fibra natural una forma de vida y también de resistencia frente a la crisis ambiental. Desde hace cuatro años trabaja la cestería en totora y pita, dos materiales vegetales que recolecta ella misma en los humedales y zonas rurales de la comuna.

Sin embargo, reconoce que la escasez hídrica ha cambiado el paisaje y puesto en riesgo su oficio. “La totora crece en los canales y humedales, pero cuando no hay suficiente agua, no alcanza a desarrollarse o crece muy chica y no sirve”, explica. Ante esa dificultad, Clarisa se ha visto obligada a recorrer distintos sectores en busca del material, especialmente en Santa Amelia, donde todavía encuentra zonas aptas para la recolección.

Más allá del trabajo artesanal, su labor tiene también un componente ambiental: al podar las totoras permite que el agua fluya mejor por los canales, contribuyendo a su mantención. Con la pita, otro de sus insumos principales, enfrenta una realidad similar: depende de la colaboración de vecinos que le permiten recolectarla desde sus jardines o patios, donde muchas veces crece sin saber su utilidad.

Con una mirada inspiradora, Clarisa invita a las nuevas generaciones a valorar los recursos del entorno y a encontrar en ellos una oportunidad. “Siempre hay algo que pueden encontrar en la naturaleza para trabajar. Eso me ayudó cuando no podía salir de casa: la tierra me dio una forma de generar ingresos y sostener a mi familia”, señala.

Sandra Arriaza: tradición en hojas de choclo y creatividad frente a la sequía

sandra arriaza

Desde Pichidegua, la artesana Sandra Arriaza lleva más de 25 años dedicada a transformar la hoja seca del maíz en piezas únicas que combinan belleza y sustentabilidad. Su oficio consiste en recolectar las hojas del choclo directamente del campo, cuando ya están secas en la mata, para luego crear posavasos, bolsos, individuales y flores decorativas teñidas en distintos colores.

Sandra explica que la recolección se realiza solo una vez al año, y que el proceso sigue siendo completamente manual. Busca predios pequeños donde los agricultores mantengan el maíz sin intervención de semillas modificadas, para obtener hojas más resistentes y duraderas. Sin embargo, la sequía y la disminución del cultivo de maíz han impactado directamente su trabajo.

“Cada vez cuesta más encontrar campos donde aún se cultive maíz. Muchos agricultores antiguos ya no están, y otros han dejado de sembrar por la falta de agua. Eso hace que la hoja escasee y se haga difícil mantener el oficio”, señala. En años secos, las mazorcas se desarrollan más pequeñas y las hojas resultan más duras y quebradizas, lo que obliga a las artesanas a adaptarse y reinventarse constantemente.

Pese a las dificultades, Sandra mantiene viva la tradición, participando en ferias regionales y nacionales, como Artesanía UC y Fundación Artesanías de Chile, además de difundir sus creaciones a través de Instagram, donde promueve el valor de un oficio que se resiste a desaparecer.

Tejedoras La Torina: mujeres que mantienen viva la tradición textil en medio de la escasez

la torina

También en la comuna de Pichidegua, la agrupación Tejedoras La Torina reúne a mujeres que trabajan la lana natural en telares, elaborando mantas, pieceras y otros tejidos tradicionales. Con tres años y medio de funcionamiento, esta agrupación se ha convertido en un espacio de autonomía, creación y apoyo mutuo para sus integrantes, en su mayoría mujeres adultas mayores.

Paulina Canto, una de sus socias fundadoras, explica que el grupo surgió “como una forma de ayudar a las socias, para que tengan sus propios ingresos y se liberen un poco del estrés cotidiano”. Sin embargo, el oficio enfrenta crecientes dificultades por la escasez de lana de oveja en la comuna. “Ya no hay dónde buscar lana, porque incluso los cerros se están usando para sembrar. Y con la sequía, todo esto se ha hecho más difícil”, señala.

Hoy deben viajar a comunas como La Estrella, Cauquenes o Curicó para conseguir la materia prima, un proceso que encarece la producción y limita el acceso a materiales de calidad. Aun así, las tejedoras persisten, combinando las labores del hogar con el trabajo en sus telares.

Las piezas pueden tomar desde varios días hasta una semana de confección, y se venden principalmente por encargo o en ferias comunales. Con personalidad jurídica reciente, la agrupación espera pronto ampliar su presencia a otras ferias regionales, mostrando no solo su arte, sino también la resiliencia femenina que sostiene los oficios tradicionales en tiempos de cambio climático y transformación rural.

Osvaldo Sandoval: historia y declive de la producción de mimbre

osvaldo sandoval

En Chimbarongo, cuna del mimbre chileno, Osvaldo Sandoval representa una vida entera dedicada a este oficio. Su familia comenzó con la producción en la década de 1920, y él mismo llegó a exportar toneladas de mimbre a países como Argentina, España y Brasil. Sin embargo, la prolongada sequía y los cambios en el mercado internacional provocaron una disminución drástica de su producción. “Hace seis o siete años tuve que reducir un 80% de la producción. Ya no se trabaja como antes, cada vez hay menos artesanos”, relata.

El testimonio de Sandoval simboliza el desafío que enfrentan los oficios tradicionales frente a la crisis climática y los cambios económicos. Su historia es, al mismo tiempo, una memoria viva del auge del mimbre chileno y una advertencia sobre la necesidad de proteger los recursos naturales y el conocimiento artesanal que los sustenta.


Director regional de Indap, Braulio Moreno

Hora de Noticias contactó al director regional de Indap Braulio Moreno, quien resaltó que el Instituto de Desarrollo Agropecuario ha implementado varios programas para apoyar a los artesanos en la Región de O'Higgins, en particular a través del Comité Técnico de Materias Primas para Artesanía Tradicional (CTMP Artesanías), creado para abordar la escasez de insumos esenciales. El director también menciona que en 2024 y 2025 se han efectuado concursos de inversiones de infraestructura y equipamiento para facilitar el acceso a materias primas. Destacó que, a través de la nueva resolución de Indap, los artesanos ahora pueden acceder a un incentivo de hasta $400.000 anuales para la restauración ecológica de sus espacios de recolección.

"El desafío es avanzar en una agenda que conecte a las comunidades locales con los recursos necesarios, a través de políticas públicas que aseguren el acceso y la sostenibilidad de las materias primas." (leer entrevista completa aquí).

Exministro de Agricultura, Esteban Valenzuela

En entrevista con el exministro de Agricultura Esteban Valenzuela Van Treek explicó que el “Primer Seminario Nacional de Materias Primas para la Artesanía, Materialidades en Riesgo”, realizado en 2022, surgió a partir de la preocupación por el impacto de la sequía en los recursos naturales utilizados en la artesanía. En especial, destacó el caso de las plantas como el mimbre, cuya recolección ha sido afectada por el avance de la fruticultura y las parcelaciones masivas. Para abordar la problemática, el Ministerio de Agricultura y los actores involucrados han trabajado en iniciativas para la preservación y gestión sostenible de las materias primas. El exministro también subrayó la relevancia de la agricultura familiar campesina e indígena en la recuperación y protección de estos recursos.

"La crisis de acceso a materias primas afecta transversalmente a los oficios artesanales. Es crucial trabajar en políticas que protejan el patrimonio natural y cultural, y vincular a las comunidades con acciones concretas que aseguren su sostenibilidad." (leer entrevista aquí).

Angélica Willson, directora ejecutiva de Artesanías de Chile

Angélica Willson comparte que, desde Artesanías de Chile, se han tomado medidas importantes para abordar los desafíos del cambio climático en la producción artesanal, especialmente en lo que respecta al acceso a materias primas. La directora destacó el papel crucial de las políticas públicas y la creación del Comité Técnico de Materias Primas para la Artesanía Tradicional, que promueve la sostenibilidad a largo plazo de los recursos utilizados en los oficios tradicionales. Además, Willson subraya el papel fundamental de las mujeres artesanas como transmisoras de conocimientos y su impacto en la preservación de las tradiciones culturales.

"La crisis climática ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de los recursos naturales utilizados por las artesanas y artesanos. Las políticas públicas deben actuar como un puente entre la sostenibilidad ecológica y el bienestar social de las comunidades artesanas." (leer entrevista completa aquí).