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Una importante reunión informativa realizó el Mop O’Higgins con la asistencia de instituciones y representantes de la municipalidad de Rengo. Se les presentó el avance del Estudio de Factibilidad para la Construcción Embalse Bollenar en la Primera Sección del Río Claro de Rengo.
Explotación de obras de regulación y embalses
Se indicó que el Ministerio de Obras Públicas está avanzando en la planificación, diseño, ejecución y explotación de obras de regulación y embalses. El propósito es asegurar el riego, consumo humano y de subsistencia, principalmente en zonas de escasez hídrica. A nivel nacional hay 26 iniciativas de embalse, donde el Embalse Bollenar ocupa el lugar número 15 en prioridad.
Avance de un 45% aproximado
En la oportunidad, el seremi Moisés Saravia dijo que “el estudio de factibilidad se encuentra en la tercera etapa, de un total de 6. Cuyo plazo total de ejecución es de 615 días corridos y se tiene un avance de un 45% aproximado. El proyecto, con una inversión sectorial de $ 783,8 millones, se inició en el mes de mayo de 2018. Y termina en agosto de 2020, plazo que considera todas las revisiones y aprobaciones respectivas.”
El Estudio
El área de estudio corresponde al río Claro de Rengo y sus afluentes. En el tramo comprendido entre su nacimiento en la Cordillera de los Andes y la zona de acceso al valle. El área de beneficio comprende el sector delimitado por el pueblo de Rosario por el norte. La localidad de Pelequén por el sur, los faldeos cordilleranos y la Ruta 5 por el oriente y poniente.
Inversión de US$ 103 millones
Saravia agregó que “la inversión del proyecto que incluye los costos del embalse. Reposición de camino privado, expropiaciones, mejoramiento de canales y medidas ambientales. Se estima del orden de US$ 103 millones, con un plazo de construcción de 36 meses. Su ejecución se proyecta mediante el sistema de concesiones, para lo cual existe un modelo de negocios de embalses concesionados y reglas de operación”.
Una sequía permanente
Uno de los cambios observados lo entrega el estudio factibilidad DOH (2019) que considera una superficie de riego en la situación actual de 5.621 hectáreas. Ya que entre los años 2013 y 2019 se ha mantenido una sequía permanente, lo que provoca disminución de las áreas cultivadas. En cambio, el estudio prefactibilidad CNR, año 2013, consideraba una superficie de riego de 6.065 hectáreas.