La diputada por la Región de O’Higgins e integrante de la comisión de la Familia de la Cámara Baja, Natalia Romero, cuestionó la “lentitud” con que se ha llevado adelante el proceso de instalación de viviendas de emergencia en la zona, específicamente en algunas comunas como Coltauco, Doñihue y Rengo, las que se vieron gravemente afectadas por el último sistema frontal y las inundaciones.
Al respecto, la parlamentaria recordó que -de acuerdo con las cifras oficiales- casi 9.500 personas quedaron damnificadas producto de la emergencia climática, la que además provocó la destrucción total de 307 viviendas, mientras que 3.201 sufrieron un daño mayor y 789 una afectación menor.
Sin embargo, y pese a la gravedad de la situación, que además mantiene a 141 personas albergadas y 126 aisladas en distintos puntos de la región, la diputada Romero advirtió que -a la fecha- no se ha instalado ninguna vivienda de emergencia en la zona, según detalló el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), pese a que se cumplirán tres semanas de la crisis.
“Lamentablemente, el mayor temor que tenían los miles de vecinos que se vieron afectados por la emergencia se está cumpliendo, que era que las autoridades los abandonaran una vez que pasara la atención de los medios. Ya vamos para las tres semanas de esta catástrofe, que por ejemplo en Coltauco provocó que más del 80% de la comuna quedara inundada, y pese a ello no vemos una respuesta oportuna de parte de las actuales autoridades, quienes han dejado en el absoluto desamparo a todos los damnificados en nuestra región”, cuestionó la representante del Distrito 15.
Por lo mismo, y junto con exigir al Gobierno que acelere la instalación de viviendas de emergencia en la zona y la entrega de los bonos comprometidos, la parlamentaria por O’Higgins también emplazó al delegado presidencial, Fabio López, a que coordine de forma más oportuna las ayudas que requieren todos los damnificados, además de flexibilizar los requisitos que se están exigiendo.
En esa línea, la diputada Romero también advirtió que el término de las vacaciones escolares de invierno podría ocasionar otro problema en la región, considerando que los estudiantes volverán a clases el próximo lunes 17 de julio, en circunstancias que aún existen cinco albergues operativos en la zona, además de los establecimientos educacionales que se vieron afectados por las inundaciones.
“Lo que uno esperaría es una actitud mucho más proactiva de parte del delegado presidencial, en términos de coordinar, junto a todo el gabinete regional, las ayudas que requieren los damnificados de esta emergencia. Es inentendible que, pese a las solicitudes realizadas por los municipios, aún no se haya instalado ninguna vivienda de emergencia en la región, como tampoco que no haya mayor información respecto a los albergados y los colegios que sufrieron distintos daños”, criticó Romero.