Doce familias afectadas por el incendio del barrio San Martín de San Fernando, recibieron el pasado martes un subsidio de arriendo.
Con recursos extraordinarios del fondo de la Unidad de Gestión de Riesgo y Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, el dinero busca ayudar a sustentar el gasto en arriendo que las familias han tenido de asumir, mientras se encuentre una solución definitiva.
Al respecto, la delegada presidencial de Colchagua, Marta Pizarro Inzunza, explicó que “por indicación del subsecretario del Interior Manuel Monsalve, hemos firmado un certificado de traspaso de estos dineros, que es un subsidio de arriendo por seis meses, siendo un gran aporte para los vecinos de la Villa Don Ernesto que se vieron afectados por el incendio. Estamos muy contentos, porque es muy importante para nosotros ser parte de entregar ayuda a los afectados por el incendio del barrio San Martín”.
Por su parte, la presidenta Comité de Vivienda Don Ernesto, Patricia Mella, agradeció la ayuda, señalando que este “es un beneficio bastante importante para las personas, porque no tienen el dinero suficiente para arrendar, por lo que me parece bastante bueno, porque les da un poco de tranquilidad”.
En total, los recursos entregados son 21 millones 600 mil pesos, los que fueron transferidos el pasado viernes a las cuentas personales de cada uno de los beneficiados.
En paralelo, junto a otras instituciones estatales, se sigue buscando una solución definitiva para los afectados por el siniestro. En ese sentido, la delegada presidencial señaló que “otro de los compromisos que como Gobierno del presidente Gabriel Boric asumimos, es realizar una mesa de trabajo, donde en los próximos días estaremos haciendo la tercera edición. En ella participa la Seremi de Vivienda, Serviu, la Municipalidad y nosotros como Delegación, quienes coordinamos y mediamos con todas las instituciones con el fin de buscar una solución definitiva”.
La instancia actualmente está buscando la fórmula para asignar subsidios habitacionales a los afectados, mientras se avanza en el proceso de demolición de las estructuras afectadas.