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Desde el 14 al 16 de febrero se llevará a cabo la sexta versión del Festival de Jazz Rancagua 2020. Cita que se consolida en la región para presentar a talentosos exponentes de este género. En esta oportunidad la mayoría las actividades son gratuitas. El evento es organizado por la Corporación de la Cultura y las Artes de la Municipalidad de la ciudad.
Una vitrina para músicos de la región
“Esta sexta edición consolida nuestro Festival de Jazz como un evento con proyección en el tiempo y con artistas de calidad, de diferente procedencia, siendo una vitrina para músicos de la región y de heterogéneos lugares. Esto demuestra que nuestro compromiso con la cultura es sólido, con el fin de ofrecer espectáculos de primer nivel para el público”, destaca Paula Gannat, directora ejecutiva de la Corporación.
Noche de vino y jazz
La cita veraniega inicia el 14 de este mes con una “Noche de vino y jazz”, a las 20:00 horas en la Casa de la Cultura. Allí tocará el grupo de Conchalí, Cuarteto Casual, ocasión en la que la gente podrá oír la música de dicho conjunto y deleitarse con una exquisita copa de vino. La asistencia es liberada, sin entradas, sólo para mayores de 18 años.
“Participar en este festival es muy importante para nosotros, porque nos están brindando un nuevo espacio para desarrollarnos como artistas y como personas. Buscamos evocar sentimientos, que se reencuentren consigo mismos mientras nos escucha”, explica Bastián Contreras (saxofón y flauta), miembro del grupo que actuará en esa fecha.
15 de febrero: Karen Rodenas Trío
El 15 de febrero, también a las 20:00 horas pero en el Teatro Regional Lucho Gatica, escucharemos el talento de Karen Rodenas Trío. Se trata de una banda conformada sólo por músicos de la región, a la cual da nombre su cantante. A ella se suman Ignacio Díaz y Fernando Farías. La entrega de invitaciones gratuitas comienza el 7 de febrero, en boletería, de 09:00 a 20:00 horas hasta agotar stock.
“Para nosotros es un honor, porque los tres somos de la zona. También nos emociona que en esta ocasión vayamos a reversionar temas de Lucho Gatica pasados al jazz. Estaremos apoyando la cultura de Rancagua y mostrando lo que hace años hacemos en diferentes partes. Hace años que yo vivo y trabajo en Santiago, estoy inserta en el circuito de este género, pero siento que a nuestra comuna le hace falta más música”, argumenta Karen, quien agrega que los tres no suelen tocar juntos, pero que ahora se reúnen para dar un concierto que podrán disfrutar sus seguidores y los fans de este estilo.
16 de febrero: Homenaje a Ella Fitzgerald
El festival cierra el 16 de febrero a las 17:00 horas en el Teatro Regional Lucho Gatica, con el concierto homenaje a “Ella Fitzgerald, Celebrando el día del amor”. Las entradas cuestan desde $5 mil y se encuentran a la venta en boletería de Millán N°342 y en sistema Punto Ticket. En este fin de semana cargado de romanticismo, la instancia contempla la participación de la reconocida cantante nacional Natalia Ramírez, acompañada por la talentosa y joven Elisa Lencina, junto a Federico Dannemann (guitarra), Sebastián Jordan (trompeta), Claudio Rubio (saxo alto) y Agustín Moya (saxo tenor). También estarán Sebastián Castro (piano), Milton Russell (contrabajo) y Félix Lecaros (batería).
"es un faro en la noche"
“Para la gran mayoría de los músicos del género, Ella Fitzgerald es la gran cantante de jazz, quizá la primera que conoces, cuya voz disfrutamos mucho por sus rasgos artísticos, su afinación, swing, su capacidad para llevar adelante verdaderas proezas vocales, entre otras características. Es una ídola, una heroína, un punto de referencia muy importante dentro del estilo. Para los demás también es una figura muy conocida, quien se hizo famosa por varios temas que tocaremos en el concierto. Tanto para los más expertos e incluso para los inexpertos, es un faro en la noche”, resalta Federico Dannemann.
"Ella Fitzgerald fue una adelantada a su época"
La cantante Natalia Ramírez agrega que “Ella Fitzgerald fue una adelantada a su época. Desde el comienzo luchó contra el racismo, por la equidad de género. Además de ser una de las primeras mujeres en hacerse cargo de una orquesta. Su carisma, talento para improvisar y su registro vocal que alcanzaba tres octavas, la llevó a destacarse en el circuito del jazz, que en ese entonces era conformado principalmente por varones”, finaliza.