Marcando historia, el Hospital Regional de Rancagua (HRR) lideró la primera jornada nacional “Conciencia y educación sobre espina bífida”, enfocada en esta patología altamente incapacitante, que, siendo un defecto del tubo neural, si se diagnostica a tiempo, es decir, entre las semanas 19 y 26 de gestación, puede ser reparada mediante una intervención intrauterina, posibilitando una proyección favorable asociada a la calidad de vida del menor que está por nacer.
Con lo anterior, la iniciativa resaltó el abordaje integral que realizan los equipos de cirugía fetal y reparación intrauterina de espina bífida, junto al equipo del policlínico de Disrafias Espinales.
Para el Dr. Edgardo Corral, ginecólogo del Servicio de Ginecología y Obstetricia del HRR, experto en cirugía de espina bífida y líder del equipo, “la instancia es de gran relevancia, por cuanto estamos posicionados dentro de escasos 40 hospitales (públicos) en el mundo que realizan este complejo procedimiento, siendo el único que lleva a cabo este desafío en Chile”, agregando que “hemos apoyado el bienestar de muchas familias con nuestro trabajo y estamos ad portas de realizar nuestra 69 intervención, lo que nos enorgullece, porque no sabíamos que esto iba a tener la trascendencia que tiene hoy, en cuanto a mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes”.
El gobernador regional Pablo Silva, quien participó activamente de la actividad, destacó, “quiero felicitar al Hospital Regional por estar desarrollando estas intervenciones que siendo tan específicas ayudan tanto al bienestar de los menores de la región, del país, y del extranjero también. Las cirugías y el trabajo posterior, hablan de un equipo comprometido en mejorar la calidad de vida de los niños y niñas”. Por otra parte, Silva subrayó, “participar de este encuentro es importante, porque nos permite visualizar cómo implementar más apoyo para que se puedan operar a más pequeños”.
El director(s) del Hospital Regional, Dr. Carlos Bisbal, agregó, “tener la oportunidad de realizar cambios positivos no solo a los menores que padecen de espina bífida, sino a todo su entorno es altamente gratificante, porque cumplimos nuestro rol de atender de forma integral a quienes lo necesitan, por su salud, por su bienestar”.
“La evidencia científica disponible estima que sobre un 40% de los niños intervenidos por esta patología tienen una autonomía importante para desplazarse por sí mismos, lo que habla del compromiso que nuestros funcionarios tienen por sus pacientes, ya que no basta con solo operar, sino con el trabajo de acompañamiento posterior a ello, la rehabilitación con que apoyamos ha evolucionado muy bien y estoy seguro que nuestro equipo de salud es un referente nacional en la materia”, concluyó el facultativo.