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En el marco de la campaña de fin de año y verano 2025-2026, la Seremi de Salud O’Higgins ha intensificado desde el mes de noviembre las acciones orientadas a resguardar la salud de la población y asegurar el cumplimiento de la normativa sanitaria vigente, con especial énfasis en la higiene e inocuidad de los alimentos que se comercializan y elaboran en la región.
Fiscalizaciones focalizadas en zonas de riesgo
Las acciones desarrolladas por la Autoridad Sanitaria han sido priorizadas considerando factores de riesgo asociados a eventos de alta afluencia de público, propios del período estival, así como a establecimientos dedicados al expendio y elaboración de alimentos. En este contexto, se han fiscalizado carnicerías, supermercados, restaurantes y otros recintos que cumplen un rol clave en la cadena de consumo de la comunidad.
Alto número de sumarios sanitarios
Respecto a los resultados de estas labores, la jefa de la Unidad de Inocuidad de Alimentos de la Seremi de Salud O’Higgins, Barbara Rosas, informó que “a la fecha, se han fiscalizado un total de 194 establecimientos, de los cuales el 70% (136) resultaron con sumarios sanitarios. De estos procedimientos, 14 establecimientos culminaron con prohibición de funcionamiento, debido a incumplimientos graves a la normativa vigente”.
Decomiso de productos cárnicos
En relación con las medidas adoptadas, la profesional detalló que la Autoridad Sanitaria ha decomisado 1.536 kilogramos de productos cárnicos, precisando que “esto es por presentar pérdida de vacío en envases, alteraciones en sus características organolépticas y expendio de productos con fechas de vencimiento caducadas. Estas situaciones constituyen factores de alto riesgo sanitario, ya que facilitan la ocurrencia de enfermedades transmitidas por alimentos (ETA)”.
Llamado a cumplir la normativa sanitaria
Desde la Seremi de Salud O’Higgins reiteraron el llamado tanto a la comunidad como a los responsables de los distintos establecimientos a cumplir de manera estricta con las normas de higiene, almacenamiento y manipulación de alimentos. El objetivo es prevenir riesgos sanitarios durante las celebraciones de fin de año y el período de verano, cuando aumenta significativamente el consumo y la demanda de productos alimenticios.
