Bajo la consigna "Arriendo a Precio Justo", el Gobierno del presidente Gabriel Boric busca dar una solución concreta que permita disminuir el déficit habitacional que sufre el país. El objetivo de este programa es entregar un techo provisorio a las familias que no tengan la capacidad de ahorro o la opción de pagar el pie de una vivienda. Por lo mismo, el plan está pensado en que las Gobernaciones, los municipios, el Serviu, empresas u organizaciones sin fines de lucro, puedan contar y administrar viviendas públicas destinadas al arriendo.
Así lo confirmó el seremi de Vivienda y Urbanismo en O’Higgins, Óscar Muñoz, quien indicó que “todos conocemos el actual escenario habitacional de nuestro país, que los precios están elevados y que no existe una instancia de poder regularlos, ya que son transacciones entre privados, y es ahí donde cada cual pone el valor que estima conveniente a lo que está vendiendo”.
“Por lo mismo, como Gobierno buscamos ser un actor relevante en estas instancias. Esto es algo nuevo para Chile, la experiencia de administrar arriendo es algo que ha empezado en algunas comunas, pero que no hay una experiencia generalizada y esperamos que con este programa se vaya ampliando. Buscamos que con el incentivo a construir se aumente la oferta y así disminuir el valor del arriendo, hasta un precio justo” recalcó la autoridad.
En este sentido, a lo que se refiere el seremi es que las instituciones tendrán la alternativa de construir o comprar viviendas. El Gobierno se impuso una meta nacional de 5 mil viviendas promedio al año para arriendo, con un precio protegido y razonable ligado a los ingresos de los usuarios, por ejemplo, como se hace en la comuna de Recoleta, donde hay un rango de valores que no puede subir por sobre la inflación.
El Plan de Emergencia Habitacional busca diversificar las líneas que les permitan a las familias acceder a un bien raíz planteándose como principal objetivo construir 260 mil viviendas en los cuatro años del Gobierno del presidente Gabriel Boric.