A pesar de estar actualmente prohibidas y sin importar las sucesivas alertas ambientales decretadas por la autoridad pertinente, en el cono norte de la provincia de Cachapoal (Mostazal, Graneros, Codegua) el olor a humo y ruidos molestos, ya son casi una costumbre. ¿Pero qué ocurre en esta zona y dónde provienen estas conductas?
Es el alcalde de Graneros, Claudio Segovia, quien levanta la voz para explicar el origen del conflicto y exige con fuerza e inmediatez una respuesta sensata, transparente y responsable.
“Ya estamos cansados de denunciar este tipo de hechos. Las quemas agrícolas son una constante sin control ni fiscalización. Nuestra comuna y las aledañas están rodeadas de viñas y empresas que se dedican al trabajo de la tierra y agradecemos las fuentes laborales que generan, sin embargo, estas prácticas son intolerables por el momento climático que vivimos. La verdad les importa un carajo la contaminación y la salud de las personas”, dice el edil.
A lo anterior, Segovia, agrega que “el zumbido de las maquinarias durante la noche es otro polo de conflicto que los vecinos y vecinas, ya nos han señalado con insistencia. Voy a solicitar una reunión urgente con los entes rectores de esta materia para analizar lo que está ocurriendo, pues, la situación sobrepasa la normalidad y está afectando el buen vivir de la comunidad”.