El miércoles 26 de enero, el fiscal de turno de la Macrozona O’Higgins, solicitó que personal de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) Rancagua, se trasladara hasta el Hospital Regional Rancagua, con el objetivo de investigar un posible delito de violación, en el cual una menor de 12 años de edad fue identificada como víctima.
Tras arribar al recinto asistencial, los policías tuvieron acceso a los resultados sexológicos practicados a la niña, los cuales corroboraban la presencia de indicadores de actividad sexual reciente.
Debido a lo anterior, los oficiales de la PDI efectuaron una serie de entrevistas y otras diligencias, lo que permitió establecer que, durante la jornada anterior, la niña habría sostenido una discusión con su madre y durante la madrugada se habría escapado de su casa, oportunidad en la cual se habría contactado con un vecino del sector, al cual conoció hace un mes, quien la habría alojado en su casa.
Según los antecedentes recopilados, durante la estadía en la casa del vecino, este habría mantenido relaciones sexuales con la víctima, lo que fue informado al fiscal de turno, quien gestionó ante el tribunal de garantía rancagüino una orden de detención en su contra.
Luego de recibir la orden judicial, los detectives de la Brisex Rancagua, se trasladaron hasta el domicilio del imputado de 27 años de edad, ubicado en el sector sur de la capital de O’Higgins, lugar donde fue detenido por el delito de violación de menor de 14 años.
Tras la detención, el imputado -que no tenía antecedentes policiales- fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Rancagua, para su respectivo control de detención.
Desde la PDI, indicaron en el caso de adultos que mantienen relaciones sexuales con menores de 14 años, a diferencia de aquellos en donde los adolescentes involucrados superan aquella edad, la legislación siempre considera el acto como una violación, aun cuando exista consentimiento de parte de la víctima.