La sudoración excesiva afecta al 10% de las personas y se presenta como una mayor sudoración en condiciones o actividades habituales. Mientras que la hiperhidrosis, es una alteración de sudoración intensa que se da no solo en un ambiente caluroso o al hacer ejercicio, sino que, de forma permanente, en cualquier momento, sin factores desencadenantes.
Hay diferentes tipos de hiperhidrosis, la más frecuente afecta manos, pies, axilas o cara, donde se presenta, al menos, una vez por semana. Este es un problema que se da por igual en ambos sexos y se estima que afecta al 3% de la población mundial.
El Dr. José Miguel Clavero, cirujano de tórax e integrante del Programa de Sudoración e Hiperhidrosis de Clínica Universidad de los Andes, afirma que “la sudoración es un proceso natural que emplea el cuerpo para disipar calor. En él, el sistema nervioso simpático activa automáticamente las glándulas sudoríparas, al momento en que la temperatura corporal aumenta o cuando la persona se encuentra nerviosa”.
En muchos casos los pacientes que sudan excesivamente, teniendo las manos húmedas y la ropa empapada por el sudor, ven alterada su rutina diaria, lo que puede generar vergüenza y en algunos casos aislamiento social. Además, el Dr. Clavero comenta que “la hiperhidrosis primaria no se desarrolla, como se piensa, por algún tipo de enfermedad como obesidad, hipertiroidismo, menopausia, diabetes, etc., sino más bien se da por una disfunción del sistema nervioso simpático, generada por una hiperfunción de las glándulas sudoríparas”.
Existen múltiples tratamientos para la sudoración excesiva y la hiperhidrosis que dependen de la severidad de la sudoración, localización y edad del paciente. Estos son:
- Leve: se trata con medicamentos orales y cremas en base a aluminio.
- Leve a moderada: se pueden usar medicamentos y cremas en base a aluminio. En hiperhidrosis axilar se puede además utilizar bótox, que tiene una duración de aproximadamente 3 a 6 meses. Como tratamiento más definitivo se utiliza el MiraDry ®, sistema de ablación de las glándulas sudoríparas por microondas. Este procedimiento ambulatorio tiene muy buenos resultados a corto y largo plazo.
- Grave: se realiza una simpatectomía por videotorascoscopía. Cirugía mínimamente invasiva que reseca una porción del nervio simpático que estimula las glándulas sudoríparas, se realiza en pabellón con anestesia general, con dos pequeñas incisiones de aproximadamente 5 mm a cada lado. Es ambulatoria y el paciente puede reintegrarse a sus actividades normales a los pocos días de la cirugía. También se recomienda para hiperhidrosis moderada cuando ha fracasado el tratamiento médico.