Un trabajo mancomunado realiza la unidad de Salud Mental del Hospital de Litueche, donde un equipo multidisciplinario desarrolla diversas acciones, para proporcionar atención integral y apoyo comunitario. El equipo está compuesto por siete profesionales: dos trabajadoras sociales, Carolina Quijada, quien lidera la unidad de manera subrogante e Ingrid Waghorn, dos sicólogos, Carolina Osorio y Juan Macaya, un médico Dr. Pablo Riesle, una Tens, Débora Olguín y una terapeuta ocupacional Francisca Donoso.
"contamos con un equipo sólido"
Al respecto, la trabajadora social, Ingrid Waghorn, destaca que “a pesar de ser un hospital de baja complejidad, contamos con un equipo sólido. Esto nos permite proporcionar una atención inicial a aquellos que necesitan evaluación de salud mental y realizar derivaciones oportunas. Disponemos de atención de lunes a viernes, psicólogo, asistente social y TO. Contamos con una lista de espera, que se va resolviendo con las derivaciones que son más urgentes. Este último tiempo se ha observado un aumento de población y hemos absorbido este aumento de demanda. No ha sido algo sencillo”.
Muchos desafíos por delante
"Sería óptimo poder solventar la brecha en recurso humano y así poder volver a retomar las actividades. En esto también es fundamental contar con el apoyo municipal, lo que por diversas razones no se ha podido concretar. Quedan muchos desafíos por delante y esperemos que podamos continuar avanzando en entregar una mejor salud mental a los habitantes de Litueche”, señaló la profesional.
“Hilando Sueños y Creando Sonrisas, son dos de las organizaciones formales conformadas por las usuarias de la unidad. Cabe destacar que dentro de los principales desafíos como programa de salud mental está el continuar trabajando, activamente, mediante una promoción efectiva e integral que entregue las herramientas adecuadas para los usuarios en pos de una buena salud mental. Continuaremos entregando atenciones a través de un modelo más integral, en beneficio de nuestros usuarios que cuentan con un diagnóstico de salud mental”, culminó la trabajadora social.