En un veredicto histórico, un jurado federal de Florida (Estados Unidos) ha determinado que la multinacional Chiquita Brands International financió a un escuadrón de la muerte paramilitar colombiano, responsable de asesinatos, torturas y el terror ejercido sobre trabajadores en las décadas de 1990 y 2000. La sentencia obliga a la compañía a pagar 38,3 millones de dólares en concepto de daños y perjuicios a ocho familias afectadas por estos crímenes.
El jurado encontró que Chiquita financió a las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) a sabiendas, en un intento de aplastar el malestar laboral en sus plantaciones, "con el fin de obtener ganancias, a pesar de los atroces abusos contra los derechos humanos de las AUC”, manifestó EarthRights International, la ONG que denunció el caso en 2007.
Entre 1997 y 2004, Chiquita proporcionó más de 1,7 millones de dólares en financiación ilegal a las AUC, contribuyendo significativamente a los sufrimientos y pérdidas en las regiones colombianas de Urabá y Magdalena. Estos fondos facilitaron los brutales asesinatos de civiles inocentes, subrayó EarthRights International en un comunicado de prensa.
La magnitud del impacto real de la vinculación entre los paramilitares y Chiquita en las comunidades afectadas es difícil de cuantificar. Sin embargo, como apuntó un abogado de International Rights Advocates en 2007, “en los últimos 10 años [1997-2007], más de 10.000 personas han sido asesinadas por las AUC, muchas de ellas en las zonas bananeras donde Chiquita financiaba las operaciones de las AUC”.
“Este veredicto envía un poderoso mensaje a las corporaciones de todo el mundo: beneficiarse de abusos contra los derechos humanos no quedará impune. Estas familias, víctimas de grupos armados y corporaciones, hicieron valer su poder y prevalecieron en el proceso judicial”, afirmó Marco Simons, asesor general de EarthRights International.
“república bananera”
Chiquita Brands tiene un oscuro historial que se remonta a su predecesora, la United Fruit Company, creada en 1899. Esta empresa fue famosa por su influencia política en varias repúblicas de Centroamérica, lo que originó el concepto de “república bananera”. Hace 96 años, el ejército colombiano, instigado por la United Fruit Company, ejecutó la Masacre de las Bananeras, en la que murieron cientos de personas en el departamento de Magdalena.
Las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), una coalición de ejércitos paramilitares de ultraderecha, jugaron un papel crucial en la violencia política de los años 2000 y son predecesores de grupos actuales como las Águilas Negras.
Esta sentencia no solo representa justicia para las familias afectadas, sino que también establece un precedente significativo en la lucha contra la impunidad de las corporaciones involucradas en abusos contra los derechos humanos.