Índice del Contenido
¿Sabías que más del 90% de los chilenos considera que su perro es parte de la familia y un motivo de felicidad? Es que sin duda ellos son el amigo más fiel de grandes y chicos, de esos que acompañan incondicionalmente en todas las aventuras, y a quienes siempre queremos darles el mejor cuidado y protegerlos para que sean felices. ¿Y qué tal si lo haces preocupándote al mismo tiempo de no generar un impacto negativo en el medio ambiente? Acá te dejamos cuatro tips para que disfrutes con tu mascota sin dejar de lado la sustentabilidad.
Cambia su rutina de limpieza
Aunque parezca paradójico, cada vez que bañas a tu perro puedes estar contaminando por el shampoo o jabón que utilizas. Por eso, desde ahora al comprar prioriza alternativas biodegradables, libre de colorantes y aromas artificiales. Los ingredientes provenientes de la naturaleza como el matico, el quillay o el aloe vera, presentes en algunos productos, son excelentes aliados para que su pelaje esté perfecto, libre de infecciones y con exquisitos olores.
Su alimentación también deja huella
Es fundamental que prefieras aquellas comidas de origen natural, libres de aditivos, que sean nutritivas y fruto de prácticas sustentables. El empaque también es un factor a considerar y, en eso, siempre será mejor la compra a granel llevando tu propia bolsa o envase reutilizable.
Haz tu mismo sus juguetes
Cuando hay creatividad no hay basura. Te invitamos a ver en una botella plástica, en cuerdas que tengas abandonadas o en calcetines viejos, los próximos juguetes de tu perro. Hay muchos tutoriales que pueden darte ideas para evitar comprar elementos de entretención desechables. ¡No sólo ayudarás al planeta sino también a tu bolsillo!
Sus paseos también pueden ser sustentables
De seguro el mejor momento de tu día es el paseo con él, pero ¿has pensado en la cantidad de plástico que generas al hacerte cargo de sus desechos? Para eso, el emprendimiento nacional I Am Not Plastic tiene bolsitas 100% compostables y libres de plástico que desde ahora deben acompañarte en todas sus caminatas al aire libre. ¿La ventaja? Son súper resistentes y se biodegradan en 180 días, ¡no en 500 años! Vienen en rollitos de 10 bolsas, un formato práctico y cómodo para que tu vida no se vuelva más complicada.