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Junta de Vigilancia del río Cachapoal cumple 20 años sembrando nubes

El programa consta de 12 equipos generadores ubicados en la zona cordillerana del Alto Cachapoal, que inyectan yoduro de plata a las nubes, lo que permite incrementar la precipitación sólida para acumular nieve durante la temporada.

La Junta de Vigilancia busca aumentar el caudal del cauce natural, en porcentajes estimados entre el 10 al 15 por ciento, lo que ha sido corroborado por tres estudios independientes a la fecha, y así disponer de mayor cantidad de agua para los sectores productivos de su jurisdicción, sean agricultura, generación eléctrica o minería.

Los 12 equipos que liberan yoduro de plata a las nubes están estratégicamente instalados en la cordillera del Alto Cachapoal y operan normalmente a cargo de Ingeniería y Proyectos Ltda., empresa contratista y de ingeniería encargada de manejar y mantener las estaciones de forma remota y en terreno.

Mayor caudal

Rodrigo Pérez Sarricueta, supervisor del trabajo y celador de la Junta e Vigilancia, valora la contribución del programa en la cuenca, y explica que, en los años de mayor efecto de la mega sequía, cuando todas las cuencas estaban en zona rojas, con problemas graves de agua, las únicas que se mantuvieron en alerta amarilla fueron las del Cachapoal y el Aconcagua, las dos donde se implementa este programa, según la información desprendida de información pública emanada de la DGA.

El celador cuenta que la mantención en activo de este programa, “en tiempos complicados”, cuando se ha tenido que redistribuir, a la Primera Sección del río Cachapoal, “le ha correspondido un 5% más de caudal, de acuerdo a lo que se decidió en la reunión de re distribución intersecciones”, gracias a los resultados obtenidos estadísticamente y la inversión en el programa.

Junto con la operación de los equipos, la Junta, por medio de su equipo de meteorólogos especializado contratados para este efecto, entrega informes diarios del Pronóstico Meteorológico y mantiene informados a los usuarios y regantes de las condiciones y variaciones del clima durante la temporada, además de informes internos del programa y la orden de activación u operación de los equipos.

Este programa, nacido en el año 2000, conocido como la ‘siembra de nubes’, es ejecutado por la Junta de Vigilancia del río Cachapoal Primera Sección, y cuenta con el financiamiento compartido entre la minera Codelco El Teniente, las hidroeléctricas PHC y Enel, todos usuarios del agua del río Cachapoal y sus Afluentes por intermedio de nuestra Junta.

Cómo funciona la siembra de nubes

El sistema funciona mediante una mezcla especifica de yoduro de plata, yoduro de potasio y acetona y con esta solución, se procede a llenar los respectivos estanques de acero inoxidable y a presurizar.

El Datalogger cumple la labor principal de controlar servomotores y solenoides, para que cuando el equipo de meteorología indique probabilidades altas y de condiciones idóneas para el encendido de los generadores, y que estos sean programados de forma remota para su encendido.

El encendido empieza a mezclar una cantidad controlada de gas a la mezcla de acetona anteriormente mencionada, que mediante un chispero genera una combustión que sube por calor y que los vientos predominantes dirigen la pluma hacia las nubes, para luego mezclarse con ellas y así se genera el incremento de precipitación.
Estas máquinas están dispuestas, como ya se indicó, estratégicamente en 12 puntos específicos de la zona para encenderlas en cada evento que lo amerite, de esta forma conseguir el nivel más elevado de pluviometría posible al estimular las nubes con este compuesto. Se suspenden las operaciones frente a la alerta emitida por la autoridad Senapred y correspondiente a lluvias de carácter notable.

Fuente: Igproy


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