Cerca de 70 personas, productores, exportadores, asesores, entre otros, llegaron hasta el Centro Regional de Investigación INIA Rayentué, en Rengo, para ser partícipes del Día de Campo que se organizó en torno al proyecto FIC "Transferencia, prospección y manejo de hongos de la madera presentes en frutales de carozo de la Región de O'Higgins", que con una inversión cercana a los $200 millones ya se encuentra en su etapa final de ejecución.
La jornada comenzó con la presentación del proyecto, que dio inicio en 2021 y tiene por objetivo cuantificar la importancia de los principales problemas fúngicos que afectan la madera en frutales de carozo y proponer estrategias de prevención y control para los huertos de la Región de O'Higgins. Esta presentación estuvo a cargo del responsable de la iniciativa, el investigador de INIA Rayentué Jaime Otárola.
Una potente herramientas a los productores
"Esta iniciativa es de gran relevancia para poder dilucidar el real impacto que los problemas fitosanitarios asociados a hongos de la madera generan para los frutales de carozos. El desconocimiento general de estas enfermedades, la expansión de la superficie de estas especies frutales y las condiciones climáticas cambiantes, han permitido que esta situación se agrave cada vez más. Si mediante el proyecto logramos identificar la dinámica poblacional anual de estos hongos-integrando las zonas agroclimáticas, la susceptibilidad varietal o algún otro factor importante, con un manejo de control determinado- podríamos proporcionar una potente herramientas a los productores con el fin de mantener los altos niveles productivos de frutales de carozo a nivel regional y nacional", enfatizó Otárola.
El Día de Campo "Manejo de hongos de la madera" continuó con reconocimiento, manejo, exhibición de muestras e identificación de hongos de la madera, a cargo de los investigadores INIA Daina Grinbergs y Javier Chilian, así como de profesionales del Laboratorio de Fitopatología ubicado en INIA Quilamapu (Chillán). Finalizó con la entrega de la Prevalencia y Estudio Prospectivo, a cargo de Valeria Osorio y el coordinador del proyecto Jaime Otárola.
El proyecto -financiado por el Gobierno Regional de O'Higgins- tiene como contraparte a distintas empresas asociadas (INpacta, BioNativa, Tavan, Anasac, Gowan y BASF). Al inicio de su ejecución, se realizó un levantamiento de información, identificando brechas a través de encuestas apuntando a un público objetivo transversal, pasando por exportadores, asesores y productores de carozos.
En la actualidad, se encuentra determinando los niveles de incidencia y severidad de los problemas fúngicos en huertos de frutales de carozo y, paralelamente, se evalúan programas de aplicaciones invernales para ver si es posible frenar el avance de la enfermedad en dos huertos con alta incidencia. Adicionalmente, se realizan monitoreos de las poblaciones de dichos hongos para ver si se puede generar una especie de alerta preventiva para enfocar los tratamientos cuando las esporas se liberan.