La segunda pandemia en Educación: la crisis de la deserción escolar en Chile

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Hace algunos días el Ministerio de Educación (Mineduc) dio a conocer el retorno a clases este 2022. Esto, luego de un periodo durante los años 2020 y 2021 en el que existieron distintas instancias truncadas, debido al contexto sanitario de nuestro país. Ahora, este anunciado retorno tiene la característica de obligatoriedad de acuerdo con lo informado por las autoridades; pero contiene, además, un grado de incertidumbre para los diferentes actores del sistema educativo.

La decisión del Ministerio de Educación ha sido fuertemente cuestionada por el Colegio de profesores de Chile al considerar que los protocolos entregados por el Mineduc son incoherentes y poco ajustados a las realidades de las distintas comunidades educativas de Chile. En esta misma línea, según fuentes del Mineduc a la fecha del 03 de marzo del 2022 el 95% de las comunidades educativas han reabierto sus puertas.

Uno de los efectos más evidentes del cierre de los establecimiento educacionales en Chile fue el aumento de las brechas educativas que se traducen en la desigualdad en el acceso a una educación de calidad, lo cual se manifiesta con mayor fuerza en grupos social altamente vulnerables.

Según un estudio de Acción Educar, en 2020 se produjo la caída en cobertura en el nivel de básica más grande en la historia de Chile: 20.400 niños y niñas salieron del sistema educativo Si actualizamos los datos con lo ocurrido en 2021, el panorama sólo empeoró.

En el caso de parvularia, los números también preocupan. Si en 2019 hubo 804 mil inscritos en sala cuna y nivel medio, en 2021 la matrícula disminuyó un 11,5%, alcanzando solo los 711 mil. Es más, la cobertura total alcanzó una tasa menor a la evidenciada en 2014, retrocediendo cerca de siete años de aumento sostenido.

En la misma línea, entre marzo y abril de este año, 7 mil colegios y 1.8 millones de estudiantes del país realizaron el Diagnóstico Integral de Aprendizajes (DIA), desarrollado por la Agencia de Calidad de la Educación para medir los aprendizajes alcanzados por los estudiantes de cada establecimiento durante 2020, y para conocer su estado socioemocional tras la suspensión de clases presenciales producto de la pandemia.

Los datos obtenidos a nivel nacional, en más de 73 mil informes, fueron entregados por la Agencia a Mineduc esta semana, y arrojaron resultados alarmantes: a nivel académico, los estudiantes entre sexto básico y 4° medio no alcanzaron los conocimientos mínimos necesarios -pues la medición se hizo sobre el currículum ya priorizado-, en lectura ni en matemáticas. En concreto, en lectura ninguno de los cursos alcanzó un 60% de los aprendizajes, porcentaje que en una equivalencia en notas es un 4.0. En matemáticas la situación es más dramática, pues ninguno de los niveles superó el 47% y en II medio los estudiantes aprendieron solo un 27% de lo que debían aprender el año pasado.

Las cifras son alarmantes, la evidente perdida de matrícula de estudiantes durante la pandemia y los bajos resultados obtenidos en las pruebas DIA de la Agencia de la calidad auguran un largo y complejo camino que las comunidades educativas deberán recorrer para recuperar el impacto negativo de la pandemia sobre las trayectorias educativas de los estudiaste más vulnerables.

Es de esperar, que el nuevo gobierno que asume el 11 de marzo del 2022 pueda focalizar sus prioridades y esfuerzos en resolver la crisis educativa que tiene a las comunidades del país en muchos casos con las manos atada, debido a la falta de recursos y el abandono de las políticas educativas.

Nelson Castañeda Vicencio
Profesor de Historia
Magíster en Desarrollo Curricular y Proyectos Educativos
Candidato a Doctor en Educación
Director de la Escuela Monseñor Enrique Cornejo


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