La Unidad de Paciente Crítico (UPC) del Hospital San Fernando se encuentra en un proceso constante y continuo de capacitación; en los últimos meses, sus equipos multidisciplinarios han participado del curso de reanimación cardiopulmonar, que estuvo a cargo de tres profesionales de dicha unidad: el kinesiólogo-docente Francisco Reyes, la enfermera especialista en cuidados intensivos Lisbeth Gaete y la enfermera-docente clínica Jesica Aro.
La enfermera supervisora de la Unidad de Tratamiento Intermedio (UTI) Adulto del Hospital San Fernando, Daniela Vega señaló que “se realizó una capacitación teórica y simulación práctica, que se logró gracias a las gestiones desarrolladas por la Subdirección de Gestión del Cuidado de la Enfermería y el RAD (Relación Asistencial Docente) de nuestro establecimiento, que logró conseguir fantomas de alto estándar del instituto AIEP, logrando la capacitación del 100% del personal profesional y técnico de nuestra unidad”.
“Estudios de consenso multinacionales coinciden en que el trabajo en UCI es complejo y dinámico, con tareas compartidas y actividades que se superponen. Por este motivo es esencial la colaboración bien estructurada entre médicos, enfermeras, kinesiólogos, fonoaudióloga, personal técnico y demás profesionales que trabajan en una UPC, sumado a la complejidad de las acciones interdisciplinarias y la transmisión de información importante. Esto último hace que la formación sea exigida por el medio, siendo esencial para estar a la altura de un equipo interdisciplinario”, finalizó la enfermera.
La formación y el entrenamiento en la UCI son cruciales para garantizar la seguridad del paciente y mejorar los resultados de atención. El personal que trabaja en UPC tiene un papel preponderante en la atención de pacientes críticos, y su formación y entrenamiento son necesarios para proporcionar cuidados especializados y complejos y evitar errores graves (Bai et al., 2020; Couto et al., 2021). La unidad de paciente crítico, dentro de sus capacitaciones continuas, debe incluir habilidades específicas como la gestión de dispositivos de ventilación mecánica, administración de drogas vasoactivas, reanimación cardiopulmonar avanzado, así como temas relacionados con la comunicación y la toma de decisiones en situaciones de emergencia, entre otros (Couto et al., 2021).
Las capacitaciones que se realizan en UPC, permiten mejorar la calidad de la atención, la formación y el entrenamiento en simulación clínica mejora la autoeficacia y la satisfacción laboral, reduciendo la fatiga y el estrés emocional asociados con el trabajo en UPC.