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La Unidad Prequirúrgica del Hospital de Rancagua se ha consolidado como un pilar esencial en la aceleración de la resolución de listas de espera, en consonancia con las directrices del Ministerio de Salud (Minsal).
Este esfuerzo se centra en priorizar a los pacientes ubicados en el percentil 75 (el 25% de las personas más antiguas del listado), aplicando criterios ministeriales como Mejor Niñez, políticas de género y apoyo a cuidadores. Además, se consideran factores clínicos y biopsicosociales que, más allá de la antigüedad, incluyen tiempos de espera máximos, condiciones clínicas (dolor, discapacidad, progresión de enfermedad, entre otros), patologías oncológicas y Garantías Explícitas en Salud (GES). La meta es asegurar una atención integral, oportuna y resolutiva para estos pacientes.
¿Qué dijo la directora del Hospital de Rancagua?
Alis Catalán, directora del hospital, destacó la importancia de la Unidad Prequirúrgica: "La Unidad Prequirúrgica desempeña un papel fundamental en nuestro hospital, ya que facilita el proceso prequirúrgico completo, lo que incluye la realización de todos los exámenes necesarios y la obtención de todas las imágenes requeridas, para garantizar que el paciente esté completamente preparado y pueda ser programado para la intervención quirúrgica". Catalán añadió que, a pesar de que algunos pacientes llevan esperando muchos años, hoy pueden presentar nuevas patologías que complican su condición inicial, lo cual representa un desafío significativo para el equipo. "Nuestro objetivo es avanzar y resolver", subrayó.
Optimizar los procesos
Andrea Vargas, enfermera jefa de la Unidad Prequirúrgica, explicó: "Nuestra labor es optimizar los procesos para que el paciente pueda acceder a sus cirugías lo más pronto posible". Para lograrlo, se trabaja en una coordinación estratégica con todas las unidades de apoyo y servicios del hospital, incluyendo laboratorio, imagenología, CAE, pabellón, esterilización, especialidad quirúrgica, y gestión de camas, entre otros. "Cada unidad o servicio involucrado aporta desde su ámbito, a la detección de impedimentos que se contraponen a la intervención o a validar que el paciente pueda ser intervenido", agregó Vargas, enfatizando que la coordinación busca garantizar un flujo de actividades eficiente y óptimo, que responda a las necesidades del paciente en menos tiempo.
Resolver más de dos mil cirugías
Paulina Vargas, enfermera e interventora de la Unidad Prequirúrgica, señaló que el hospital se ha propuesto una meta ambiciosa: resolver más de dos mil cirugías del percentil 75. "Esta meta supera con creces nuestras capacidades históricas y queremos enfrentarla como un desafío a superar, donde el servicio prequirúrgico juega un rol clave", afirmó. Para cumplir esta meta, se ha estructurado el trabajo con un enfoque riguroso en la producción, calidad del proceso, programación y ejecución eficiente de la tabla quirúrgica, destacando la importancia del trabajo prequirúrgico en acelerar las intervenciones y brindar una respuesta satisfactoria a los pacientes.
Con esta estrategia colaborativa y la dedicación del equipo del Hospital de Rancagua, se espera mejorar significativamente los tiempos de espera y la calidad de vida de los pacientes, asegurando que reciban la atención que necesitan de manera oportuna y efectiva.