Durante la jornada del miércoles 24 de abril, el Ministerio Público solicitó la presencia de personal de la Brigada de Homicidios (BH) Rancagua y peritos del Laboratorio de Criminalística (Lacrim) Regional de la PDI en una vivienda ubicada en el sector poniente de la capital de la Región de O’Higgins. La solicitud tenía como objetivo verificar la existencia de un cuerpo al interior de la residencia.
El llamado se realizó luego de que un hombre de 70 años se presentara ante la Fiscalía para regularizar el fallecimiento de su esposa, quien presuntamente habría muerto en septiembre del año 2022, a los 67 años, a causa de una enfermedad terminal. Según el relato del hombre, el cuerpo de su esposa habría permanecido en la casa desde entonces.
El personal de la policía civil se trasladó al domicilio indicado y descubrió en el patio de la propiedad un ataúd ubicado sobre un altar. En coordinación con el Servicio Médico Legal, se procedió a abrir el féretro, confirmando la presencia de un cuerpo que aparentemente correspondería al de una mujer.
Sin embargo, la PDI informó que, debido al avanzado estado de descomposición del cuerpo, aún no es posible confirmar de manera científica su identidad. Por esta razón, el cuerpo será sometido a exámenes forenses por parte del Servicio Médico Legal.
Aunque el hombre presentó un certificado de defunción de su esposa, las autoridades desconocen por qué no inició los trámites para sepultarla conforme a las normativas legales establecidas. La investigación continúa para esclarecer los detalles de este perturbador hallazgo.