El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) anunció la puesta en marcha de una serie de proyectos tecnológicos dentro de Chile, en los que figuran dos que van en directo beneficio del fortalecimiento del Centro Experimental INIA Hidango, ubicado en la comuna de Litueche, Región de O’Higgins.
Con una inversión superior a los $35 millones, a través de la creación del Fondo de Inversión Rotativo (FIR), el centro -con administración regional dependiente de INIA Rayentué, apuesta por tecnologías validadas por sus investigaciones en sus predios, y optimizar así dos áreas fundamentales del quehacer en el secano: precisión de siembra y maternidad ovina.
“Sin lugar a dudas, es una excelente noticia, que es fruto del tremendo trabajo que ha desarrollado el encargado predial de INIA Hidango, José Olguín, y todo su equipo de trabajo técnico y administrativo. Esta inversión era muy necesaria y esperada, para avanzar en materias de vinculación y transferencia tecnológica. Es un gran esfuerzo institucional para lograr acercar las tecnologías a los agricultores y que estos vean en persona la factibilidad y eficiencia de las propuestas de investigación y desarrollo que INIA realiza”, señaló el director regional de INIA Rayentué, Cristián Aguirre.
El subdirector nacional de Vinculación con el Medio y Transferencia Tecnológica de INIA, Rodrigo de la Barra, agregó que “apostamos con esto a ser referentes del sector y que cada campo o predio INIA sea un referente en su territorio, no sólo por la utilización de tecnologías, sino también por sus rendimientos prediales. Serán espacio donde los agricultores aprenderán sobre el manejo de cada producto y sobre todo qué tecnología o innovación se recomienda para alcanzar un alto rendimiento en sus campos”.
Los dos ejes de acción en los que se invertirá en el C.E. Hidango serán la incorporación de equipos de siembra de última tecnología, lo que permitirá que en los semilleros se pueda lograr una distribución uniforme de las semillas, mayor eficiencia en el uso de los fertilizantes, un control sanitario más eficaz y un mayor rendimiento de cosecha.
Además, se inyectarán recursos en Maternidad Ovina, que busca generar un aumento en la calidad y cantidad de los corderos del plantel ovino del predio INIA Hidango, poniendo en acción las tecnologías desarrolladas por el instituto y utilizadas ampliamente en sus labores de extensión. Con esta inversión se fortalece el rol de vitrina tecnológica en ganadería ovina para los productores/as del secano costero.
Este proceso de modernización institucional en INIA es liderado por la subdirección nacional de Vinculación con el Medio y Transferencia Tecnológica, y comenzará a ejecutarse dentro de los próximos meses.