La palabra tutor viene del latín clásico ''tueor'‘, que significa observar, dirigir y proteger, y es justamente esto lo que busca el Ministerio de Educación con un nuevo plan de acompañamiento donde estudiantes de pedagogías apoyan a alumnos y alumnas de establecimientos educacionales con financiamiento público del país.
En la Sexta Región el programa “Seamos comunidad que acompaña y apoya”, es coordinado por la seremi de Educación y llevado a cabo por la Universidad de O'Higgins y abarca en una primera instancia a establecimientos educacionales de las comunas de Rengo, Rancagua, Machalí y Olivar. La selección de las y los alumnos a tutorar recae en los propios colegios, enfocándose en los que presentan mayor dificultad en sus procesos de aprendizaje o poseen algún obstáculo en su continuidad educativa, poniendo especial énfasis en aquellos/as que hayan presentado un mayor índice de ausentismo durante el primer semestre.
Para la coordinadora regional de la política "Seamos Comunidad" del Mineduc, Andrea Maldonado, esta instancia se propone generar una alianza de colaboración recíproca entre Universidades y centros educativos, “para lo que realizamos una invitación a las facultades de Educación de universidades cuyas carreras de pedagogía se encuentra acreditadas, convocando a las y los futuros y futuras docentes y educadoras/es de párvulo a colaborar con las necesidades de apoyo educativo que las comunidades educativas identifican en sus estudiantes” señaló la coordinadora quien destacó el rol orientador del programa que permite a los establecimientos identificar áreas clave en las que sus estudiantes requieren apoyo y generar las condiciones para que las tutoras y los tutores puedan dar una respuesta a esas necesidades, bajo la orientación de sus profesores guía y los equipos docentes de los establecimientos educacionales.
Las tutorías son parte de la práctica inicial, intermedia o profesional de los profesores y profesoras en formación y también pueden integrarse estudiantes que quieran participar del programa fuera de sus actividades de práctica.
El plan se orienta a fortalecer la motivación escolar, el aprendizaje y el bienestar integral de los y las estudiantes y se puede realizar en cualquier establecimiento educacional que reciba subvención estatal. Se espera que a través de este proceso vayan progresivamente alcanzando aquellos aprendizajes y habilidades que, por distintas razones, no se desarrollaron en pandemia o durante el primer semestre, constituyéndose como un espacio complementario de apoyo.